jueves, 30 de abril de 2009

Ahora entiendo



Hace unos años solía ver con desconfianza a las personas que usan lentes oscuros, aunque su diseño fuera atractivo o tuvieran un logo caro; los veía caminar e imaginaba “Ese wey se trae algo” o “¿qué acabas de hacer reina?”

Si la persona entablaba conversación conmigo mi paranoia eterna solo me hacia pensar “¿Qué me escondes?” Por lo tanto sus palabras no valían, solo observaba, tratando de mirar a través del cristal oscuro…

Hace poco compre unos lentes y, aunque trato de no platicar con las personas mientras los traigo puestos, pienso:
No puedes ver el gesto de mis ojos mientras te veo y pienso en todas estas cosas que quiero esconderte.

Ahora entiendo a las personas con lentes oscuros:
No importa que las palabras no valgan, el hecho de saber y sentir que escondes algo te da esa sonrisa misteriosa, que a los lentes les va bien ;) .

martes, 14 de abril de 2009

En la fila de las tortillas



Esa tarde normal de mis 16 fui por las tortillas para la comida, llegué en el momento adecuado porque después de 3 personas era mi turno, y al ver hacia atrás la fila se extendía a 5 o 6 personas. Ahí estaba ella, con esa costumbre de ir al mandado descalza, le parecía fácil pues la tortillería estaba a 30 metros de su casa.

Llevaba puesto su uniforme de educación física de la secundaria (no cualquier uniforme, era uno de secundaria en la costa): playera polo con el escudo de la institución y falda a pliegues de dos colores, muy por encima de la rodilla (mi prenda favorita en mujeres). La había conocido hacía una semana, era la niñera de mi vecino de en frente. Tras algunos besos las intenciones de ambos habían quedado claras, ella me avisaría qué día, yo esperaría, paciente, total, sé dónde vives.

Pague por mi respectivo medio kilo de las preciadas tortillas y me dirigí fila atrás, de regreso a casa, al pasar junto a ella le sonreí, en inocente, a su mirada sospechosa.
-Te espero en mi casa a las 7 - dijo en voz alta, emocionada, como si no hubiera personas alrededor; parecía que había esperado mucho tiempo a que me diera la vuelta sólo para avisarme, yo seguí caminando.

Mire, sonriendo sonrojado, la cara de las personas formadas mientras les pasaba a un lado: la vecina jovenmayorqueyo hizo cara de incrédula (si, los menores también ligamos), el niñomalandro me sonreía en complicidad (…!¿cómplice de que?!), las señorasamargadas del final de la fila me miraban con desaprobación (en esta parte levante mi cara y sonreí haciendo una reverencia).

Estaba por salir de la escena cuando me nombró al otro extremo, giré sin detener mi camino, la vi, me sonrió, los carros dejaron de pasar, los consumidores de tortillas contuvieron la respiración, hasta la maquina de las tortillas enmudeció:
No va a estar mi mamá

¿Qué si me dio pena?
¿Qué sería de mi si no me la aguantara?

sábado, 4 de abril de 2009

I know your sister too


Domingo 11am
Me levanto de la fiesta, en mi cuarto, saldo blanco. Eso significa que las chicas de la reunión debían llegar a casa temprano y en mi celular debe haber 1 o 2 teléfonos nuevos.

Verifico: En llamadas realizadas tengo un nombre de mujer a las 2 de la mañana, (no que le haya llamado en cuanto se dio la vuelta, esto es para recordar que alguien me dio su número), los recuerdos de la noche llegan a flashazos…debe haber estado bien, le hablé…pasa de los 20 años, puntos menos…es el único numero de la noche, puntos a favor…
Ahora recuerdo, quedé de comer con ella…en mi casa, hoy.

La llamada:

– Hola, bla bla bla, la comida es a la 1 –
– Hoy no voy a poder porque wa wa wa wa – dijo en tono sincero.
Mierda, perdí un minuto de saldo celular. Pero, como dicen: “La vida es de sacrificios”.

Plan B

Antes de colgar escucho una voz mas aguda que la de mi numero de anoche
– Esa voz, ¿quién es? – pregunto sin pensar
– Es mi hermana–
– ¿Tienes una hermana? – dije, tratando de contener la emoción (tal vez podía aprovechar que el siguiente minuto de la llamada había comenzado).
–Si, ¿quieres que te la pase o que?- pregunto, incrédula (you gotme girl).
– ¿Cuántos años tiene? – respondipregunté en seguida.
– 17 – reveló en ese tono femenino de “no te va a interesar” (SHE gotme)
–Pásamela…

Debo decir que la accesibilidad de la niña me inquieto, pero era domingo, ¿dónde hay fiestas los domingos? No quería quedarme en casa sin hacer nada, después de todo los lunes no existen para mi. La comida no se canceló, cambió de invitada.

Buena suerte

Me disponía a largarme pasados los 10 minutos de espera bajo el Cocodrilo Gigante. Pero una chica de pelo negro, largo y rizado, con ojos grandes y labios bonitos, en rojo; llamó mi atención, la blusa que llevaba cubría escasamente sus muslos bien formados…y sus redondos pechos; jeans entallados y los tacones eran altos, de color blanco… (cant be). Seguí mi camino, ella continuaba acercándose.

A pocos metros, dejando ver su perforación en la lengua, dijo mi nombre.
– ¿Hola? – saludé mientras le sonreía en perverso. Era mi invitada.

Quiero ser una pornstar

Caminamos a casa entre la trivial plática de recién conocidos: cómo te llamas y dónde estudias, preparamos de comer mientras yo tomaba vino tinto en exceso, (siempre me ha gustado tomar en la cocina, que no mientras seduzco pero no estaba seduciendo a nadie, just havin’ fun). Platicamos mucho, me habló, le hablé, nos contamos historias de vida, ideas, chistes; reímos juntos pero la única conversación que recuerdo de aquel único encuentro viene después de comer:

Al entrar juntos a mi cuarto, vi mi Cam, una reflex, mecánica. De esas que se debe esperar a terminar el rollo y entregarlo en un estudio…o tener un cuarto oscuro, (me gusta llamarlo El Cuarto Rojo, pero eso es otra historia bastarda).
– ¿Te tomo fotos? – dije por instinto
– ¡Si! – expresó emocionada
– Pero quédate nada más en tu blusa, como si fuera un vestido.

En este momento la invitada enmudece, me mira. No la voltee a ver, hice como que estaba entretenido ajustando las opciones de la cámara mientras esperaba un “no”. Me dejó de interesar desde que entró a la casa. (En realidad quería prolongar mi embriaguez el resto del día, solo.)

Tras los largos segundos de silencio decido ponerle atención, la miro frente a mi y, como si fuera la señal que estaba esperando, da una vista a su propio cuerpo, observa esos enormes tacones, luego regresa a mi, y dice:
¿Y si me dejo las zapatillas? Para verme más puta.

miércoles, 1 de abril de 2009

RompePoemas

I. Los dos tenemos mundo alterno
II. y aunque de varias maneras son distintos,
III. es lo que tenemos en común.

IV. He muerto por desaparecer el universo
V. para entrar en tu planeta
VI. como veces he fallecido
VII. desvaneciendo presencias
VIII.para acorralarte,
IX. comerme tus ojos
X. masticar tus labios
XI. rasgarte los muslos
XII. estirar tus rizos;
XIII. a tu placer.
XIV. Y envenenarte
XV. para que no mueras nunca,
XVI. para que te quedes cerca.

XVII. Pero, como siempre,
XVIII.temo fallar;
XIX. y aun mas,
XX. no poder regresar la pagina
XXI ....Otra vez.
Marzo-Abril/2004